Culiacán, Sin.-
Ese es el problema, que más
del 90 % de los trabajadores mexicanos con un empleo formal tienen sueldos que
no les alcanzan para subsistir, lo que obliga
a estas personas, ya no se digan los desempleados, a
autoemplearse para mejorar sus ingresos, creando aunque sea dichos empleos informales, acciones de la
población para subsistir que la Reforma Fiscal, aunque no haya sido su
pretensión al hacerla, está afectando de
manera negativa a quienes tratan de salir adelante de esa manera., autoempleándose,
ya no se diga con los desempleados, que ahora sienten que hasta la posibilidad
de autoemplearse les pudiera estar siendo prohibitiva.
Los desempleados
buscan mecanismos de sobrevivencia en empleos que no tiene ni genera la
economía formal por razones ya explicadas anteriormente, motivo por el que se integran a lo que se
puede, con tal que les proporcionen un
ingreso, aunque carezcan de prestaciones y de seguridad social, con las
desventajas que conlleva a corto y largo plazo, al no contar con servicio médico, ni la posibilidad de alguna pensión o jubilación al
final de su vida laboral.
Sin embargo, el desempleo, el subempleo, el
autoempleo, la economía informal, que trata de abatirse con la reforma fiscal
al tratar de accederlos con los incentivos del RIF a través de que se registren
en el mismo, la realidad muestra poco avance, como
resultado de que lo están evitando por el temor que pueden estarles provocando
las revisiones fiscales.
Y lo serio, lo
delicado, lo muy delicado, es que, en lo que finalmente va a repercutir, es que
la población se empobrezca más, porque difícilmente los que estaban ahorita en
una actividad de autoempleo, de economía informal vayan a continuarla, ante el temor referido, en donde ellos creen
y consideran que en una revisión puedan perder los pocos bienes que hubieran
hecho con tanta dificultad, carencias y problemas.
La reincorporación
de todos ellos al sistema tributario, desafortunadamente, posiblemente, tienda
más a que quienes de ello han hecho su forma y medio de vida lo dejen de hacer,
lo dejen de tener, ó en el mejor de los
casos, se decidan a continuar
autoempleándose a escondidas en su
propia casa,
Lo cual haría al
remedio peor que la enfermedad, pues no hay empleo, no hay beneficios fiscales
que puedan recibir, no hay aumentos de la recaudación que se espera de ellos, y
lo peor del caso, si no se modifica, por ejemplo, poniéndoles cuotas concretas
y específicas de cuanto tributar
para determinados niveles de
ingreso, lo mas probable es que la
medida tienda a crear desempleo dentro de los propios informales, con las consecuencias nefastas que
sobre el mercado interno implica que no haya por tanto ni sueldos ni salarios
que antes habría, ni poder de compra, ni consumo, ni producción, ni crecimiento
del PIB, por consiguiente y otra vez, no generación de empleos, no sueldos ni
salarios, no poder de compra, no aumento
de mercado interno, y así el círculo
vicioso de nunca acabar.
Y todo porque a los hacedores de la política
económica, o de plano ignoran las implicaciones en círculo de las medidas, o de
plano, si las conocen, les da flojera analizarlas.
Comentarios:mariopescador1@gmail.com
ECONOMISTA, ITAM, MAESTRÍA EN ECONOMÍA, NEW SCHOOL FOR SOCIAL RESEARCH,
N.Y. PREMIO DE ECONOMÍA, CDE,
DESEMPEÑO EN: SHCP- SECRETARÍA DE HACIENDA Y CRÉDITO PÚBLICO; SPP-SECRETARIA DE
PROGRAMACIÓN Y PRESUPUESTO; SEP- SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA; SSA-
SECRETARÍA DE SALUD; SEDESOL-SEDUE- SECRETARÍA DE DESARROLLO URBANO-DESARROLLO
SOCIAL; EXCONSEJERO BANCA NACIONAL Y PRIVADA; EXCANDIDATO DIPUTADO FEDERAL
PLURINOMINAL; EXPRESIDENTE FUNDACIÒN COLOSIO SINALOA; ACTUALMENTE CONTRALOR
INTERNO DE LA SECRETARÍA DE EDUCACIÓN PÚBLICA Y CULTURA DEL GOBIERNO DEL ESTADO
DE SINALOA - SEPYC